LA LEY DE CÍRCULO


La Ley del Círculo es una de las Grandes Leyes de Dios.

A veces llamada Ley de Causa y Efecto, la Ley de Bumerang o “lo que siembras es lo que recoges”. 

Lo que tú colocas en tus pensamientos, palabras y obras, entra en tu propio ser primero y luego sale hacia la persona, lugar o condición a donde la diriges; pero desde el momento en que tú eres el Hogar de esa Vida y energía, cuando haya alcanzado su destino, comienza su regreso a casa trayéndote de regalo todo lo que pueda de vibraciones y cualidades similares a aquellos con que fue originalmente cargada. Por lo tanto, recibes de nuevo en tu mundo aquellos que tú mandaste, así fuera constructivo o destructivo.

Si criticas serás criticado; si eres injusto se te devuelve la injusticia; si maltratas serás maltratado. Estas causas que tú has sembrado tienen que ser balanceadas y ajustadas antes de que puedas ser libre de sus efectos. Cuando siembras maíz, cosechas maíz; cuando siembras flores, cosechas flores; cuando siembras amor, bondad y causas constructivas, cosechas lo mismo; si siembras discordia cosechas discordia.

¿Cómo pueden las personas inteligentes creer que pueden continuar sembrando o lanzando críticas, irritación, impurezas y todas las demás cualidades destructivas y, sin embargo, poder cosechar salud, amor, dinero, felicidad y todas las cosas buenas de la vida?. El mundo no ha hecho sino sembrar odio, avaricia, egoísmo, crueldad –y el mundo entero está cosechando el caos de confusiones y malestares de toda clase.

Cuando tu vida maltrata a otra por medio de tu sentimiento, pensamiento, palabra y obras, contraes una deuda de energía que algún día tendrá que ser saldada. Muchas veces el individuo a quien tú dañaste (o el que te dañó a ti) muere o sale de su cuerpo antes que la deuda sea saldada y entonces se hace necesaria una futura oportunidad en la cual ambos individuos pueden encontrarse de nuevo y por circunstancias aparentemente naturales tengan oportunidad de armonizar aquella deuda por medio de un servicio o una asistencia dada al que fue lastimado. Estos ajustes sólo pueden hacerse a través de futuras encarnaciones. La Vida los trae de nuevo, juntándolos hasta que aprendan a trabajar armoniosamente.

Fuente: La Voz del Yo Soy - Conny Méndez

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@latelierdiangel


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